Por: Miguel Angel Trujillo

Una erupción solar masiva desencadena alertas en Colombia por posibles afectaciones a vuelos y tecnologías de comunicación hasta el 25 de mayo.

Una intensa tormenta solar, clasificada como llamarada X2.7, ha sido detectada por el Observatorio de Dinámica Solar de la NASA el 14 de mayo, desatando una serie de partículas cargadas que ahora se dirigen hacia la Tierra. Este fenómeno, que se extenderá hasta el 25 de mayo, podría perturbar significativamente los sistemas de comunicación y navegación satelital, así como las operaciones aéreas en Colombia.

La Aeronáutica Civil de Colombia ha emitido una alerta preventiva, instando a los viajeros a prepararse para posibles cambios en los itinerarios de vuelo. "Estamos monitoreando de cerca la situación para implementar las medidas necesarias que aseguren la seguridad de todos los vuelos", afirmó un portavoz de la entidad. Esta alerta se suma a las advertencias emitidas por la NOAA y otros organismos internacionales sobre los riesgos asociados a esta tormenta solar.

Las tormentas solares ocurren cuando el Sol expulsa una gran cantidad de energía y partículas cargadas, las cuales, al llegar a la Tierra, pueden interferir con la ionosfera y afectar las señales de radio y GPS. Este fenómeno no solo impacta la tecnología en el espacio, sino que también tiene el potencial de alterar infraestructuras críticas en la superficie.

El impacto de esta tormenta solar es particularmente significativo debido a su magnitud. Los científicos continúan monitoreando la actividad solar para prever posibles nuevas erupciones. Mientras tanto, las autoridades aeronáuticas y tecnológicas trabajan conjuntamente para minimizar los efectos adversos y mantener la normalidad en la medida de lo posible. La situación subraya la vulnerabilidad de nuestras modernas infraestructuras tecnológicas a fenómenos naturales extraordinarios.