Por: Katherine Cruz

El presidente Gustavo Petro volvió a defender a Juliana Guerrero, involucrada en varias polémicas. Sus declaraciones, junto a señalamientos sobre uso indebido de aeronaves y congelamiento de contratos, agudizan la crisis en el Ministerio.

El presidente Petro salió en defensa de Juliana y Victoria Guerrero, reconociendo la influencia del poder. Sus declaraciones sobre la juventud y la experiencia generaron controversia, mientras investigaciones sobre el uso de recursos públicos continúan.

La crisis en el Ministerio de Igualdad se profundiza tras el nombramiento de un nuevo ministro. Las controversias que rodean a Juliana Guerrero y su hermana Victoria, hijas del ministro de Minas y Energía, han generado un intenso debate público y político. Se cuestiona el presunto uso indebido de una aeronave de la Policía Nacional y la orden de paralizar contrataciones dentro del Ministerio.

El presidente Petro, en un intento por calmar la situación, declaró que "la juventud debe tener una oportunidad de poder", aunque reconoció que "el poder daña".

Sus afirmaciones sobre la experiencia y la edad, al decir "Claro que por jóvenes deberían tener menos estudios, pero hay viejos que no leen", desataron nuevas críticas. Su defensa de las hermanas Guerrero, sin desmentir las acusaciones, intensifica el descontento.

La investigación sobre el uso indebido de la aeronave policial y la suspensión de contratos dentro del Ministerio son claves para determinar la magnitud de las irregularidades. La falta de explicaciones claras por parte del gobierno, sumada a las declaraciones controversiales del presidente, podría generar una mayor inestabilidad política y dañar la imagen del gobierno. La situación exige una respuesta contundente y transparente para salvaguardar la credibilidad del Ministerio de Igualdad y la confianza pública.